Aquellos que vivan ya con un gato comprenderán enseguida de lo que hablamos: el minino nos acompaña a casi todas partes y, entre ellas, no puede faltar el cuarto de baño. Para quienes estén pensando en adoptar un animal peludo, deben tener esto en cuenta. Es algo natural y normal que sucede con los gatos, y no importa la edad que tengan.

Para salir de dudas y comprender algo mejor estas pautas de comportamiento, descubrimos exactamente por qué los gatos te acompañan al baño. Estos son los principales motivos.

Tu gato tiene sed

Gato

Según el carácter y el comportamiento adquirido de nuestro amigo de cuatro patas, las causas por las que nos siga hasta el baño pueden diferir, o incluso pueden variar entre unas ocasiones u otras, según cómo se encuentre. Uno de los principales motivos es que puede que el gato tenga sed. De este modo, nos seguirá hasta el baño para poder beber agua fresca del grifo o de la ducha, que suele encantarles a todos.

Si esta es la causa, tienes que corregir este hábito cuanto antes. Debe acostumbrarse a beber en su bebedero exclusivamente. Ten en cuenta que, si no estás en casa, por mucha sed que tenga, si se ha habituado a beber solo agua que corre del grifo, no va a beber de su cuenco y esto podría ocasionarle problemas de salud.

Tu gato tiene calor

Gato en la bañera

Otra posible razón es que tu gato tenga calor. Esto suele suceder especialmente en las épocas más cálidas del año, como los meses de verano. Debemos tener en cuenta que, con frecuencia, el cuarto de baño es una de las estancias más frescas de toda la casa, así que si hace mucho calor y vas a esa estancia, el gato te seguirá para estar más fresquito.

Los azulejos, las baldosas, el lavabo o incluso la bañera le ayudarán a bajar la temperatura corporal y estar más a gusto, por lo que no desaprovechará la ocasión de poder tumbarse sobre ellas.

Tu gato quiere jugar

Sí, puede que la causa por la que tu gato te siga hasta el baño es porque quiera jugar. Es posible que te sorprenda, pero una estancia como esta está llena de posibilidades para los juegos de los curiosos e inquietos felinos.

Tanto las toallas colgando que se balancean cuando les da con la pata como el rollo de papel higiénico que se desenrolla ofreciendo minutos interminables de diversión pueden ser una tentación muy fuerte para tu minino. Si tu gato es juguetón, y ha descubierto las posibilidades del cuarto de baño, tampoco desaprovechará las oportunidades de meterse en él cada vez que tenga oportunidad.

Comportamiento posesivo

Teclado

Es frecuente que tu gato te siga hasta el baño porque también va detrás de ti por toda la casa. En esos casos en los que no se separa nunca de tu lado y te persigue tan pronto como abandonas una habitación, estamos hablando de que muestra un comportamiento posesivo.

Tu amigo de cuatro patas considera que le perteneces y, por ese motivo, no va a quitarte la vista de encima. Además, cree que él es quien manda, por lo que también mostrará otros tipos de gestos y comportamientos. Entre los más frecuentes se encuentran ponerse encima de ti cuando duermes, subirse al teclado para que dejes de escribir en el ordenador y le prestes atención, y seguirte hasta el baño en cualquier momento y circunstancia.

Tu gato quiere cariño

Gato en el regazo

No siempre sucede que el motivo por que el tu gato te siga a todas partes de la casa sea una señal de un comportamiento posesivo. También es posible que simplemente busque compañía y demande de tal forma tu cariño. Esto pasa con frecuencia cuando tu gato está mucho tiempo solo.

Si trabajas muchas horas fuera de casa o, por cualquier otra circunstancia, pasas pocas horas en ella, cuando regreses y estés con él va a requerir tu atención constante y que le des muchos mimos. Como consecuencia, estará pegado a ti como si fuera un perrito y no te dejará solo en ningún momento, ya sea que vayas al baño, a la cocina o a cualquier otra estancia de la casa.

Problemas de salud

Sin embargo, hay un detalle que debes tener en cuenta. Si tu gato no ha tenido nunca este comportamiento y mantiene una actitud más independiente sin seguirte a todas partes, pero de pronto, un día, no se despega de tus talones y va contigo a todas partes, es momento de tomar precauciones. Puede que esté enfermo, le duela algo o tiene alguna pulga o insecto molesto que no logra quitarse de encima, así que revisa su salud y, si tienes dudas, llévalo al veterinario.

 

Fuente: Público